El movimiento de la Psicología Humanista
Assumpta Junyent:
psicóloga clínica i psicoterapeuta
RESUMEN
El motivo del presente artículo es dar a conocer algunos aspectos generales del Movimiento de la Psicología Humanista como “tercera fuerza” en el campo de la Psicología -después del psicoanálisis y del conductismo- , los principios más importantes que comparten los distintos Modelos de línea Humanista, y algunos de los aspectos metodológicos y científicos que los sostienen. No pretende, en ningún momento, ser una crítica a ninguno de los modelos alternativos; muy al contrario, pretende simplemente reflejar las bases esenciales en las que se apoya la Psicología Humanista, partiendo de una visión integradora y respetuosa de las aportaciones de cada una de las distintas escuelas al estudio de la complejidad de la condición humana.
INTRODUCCIÓN
El movimiento de la Psicología Humanista surgió en Norteamérica durante el siglo XX en los años 50 y principios de los 60, como un movimiento social interdisciplinar predominantemente psicológico, pero no de forma exclusiva, ya que se fue manifestando en todos los aspectos del pensamiento y de la interacción humana: sociología, antropología, educación, política, teología y filosofía.
Se fue desarrollando a medida que un grupo de psicólogos y psiquiatras se dieron cuenta, a través de conferencias y comunicaciones en congresos, de sus coincidencias en unas mismas inquietudes y que -a pesar de la diversidad en sus posiciones teóricas o en sus metodologías psicoterapéuticas- compartían un cierto distanciamiento y protesta en relación a algunos de los postulados de los dos paradigmas predominantes en psicología de la época: el conductista y el psicoanalítico. La mayor parte de estos autores eran de orientación fenomenológica o existencial, teóricos de la personalidad que procedían del neopsicoanálisis o del conductismo y también teóricos de la ciencia como Ludwing von Bertalanffy.
Misiak y Sexton, 1973 en un estudio sobre las raíces históricas de la Psicología Humanista, proponen la siguiente definición: “la psicología humanística es un acercamiento polifacético a la experiencia y a la conducta humana que centra su atención
en la singularidad del hombre y en su autorrealización” (1973, p. 127).
En el campo de la Psicología, a pesar de carecer de la unidad de escuela, se fue planteando como una alternativa: proponía una visión integral, coherente y lógica de la rica complejidad del ser humano, que a su vez se fue consolidando con una firme fundamentación epistemológica de su enfoque y con el desarrollo y estructuración de metodologías y técnicas apropiadas y sensibles a lo más específicamente humano: la libertad, la conciencia, la creatividad, los valores, los sentimientos o la dignidad.